El Día del Lamento marcó la vida de todos en Khorvaire, pero la Casa Cannith puede haber sido la más afectada, con la pérdida de su laboratorio principal y su patriarca y heredero que en él se encontraban trabajando. Junto a ello y las medias post-guerra impuestas por el Tratado del Trono, la Casa está a punto de sucumbir al caos que diferentes facciones internas la están empujando en su pugna por el poder.

«El ingenio mostrará su lado más oscuro.»

Al fallecer hace ya varios años Starrin d’Cannith y su hijo, el Concejo de Ancianos se dedicó a interpretar su personalidad y voluntad para poder elegir un nuevo patriarca. Sin embargo, es difícil para ellos llegar a una decisión, pues los candidatos se diferencian precisamente en las características que deberían reunir para ser elegidos.

La Casa ha quedado dividida en tres facciones en todos los aspectos menos el formal: Oeste, Este y Sur, cada una a cargo de uno de los candidatos más aptos, y cada uno de ellos dirigiéndola de acuerdo a sus designios. El Concejo de Ancianos ha determinado que a fines del año 999 YK, evaluará los logros de cada uno por separado y así nombrará al nuevo patriarca de la Casa.

Como es de suponerse, cada uno de los favorecidos persigue objetivos bastante distintos, cada uno más amoral que el otro. El espionaje y el contraespionaje se encuentran a la orden del día, y es por eso que la desaparición de Merrix d’Cannith, nieto del genio creador de los warforged durante la Última Guerra y responsable de Cannith Sur, despierta las suspicacias de toda la Casa y la sociedad khorvairiana. Las teorías y las conspiraciones abundan, sin que ninguna sea tomada totalmente en serio debido a la falta de evidencia. La Sede de Cannith Sur en las Dragon Towers de Sharn son una fortaleza inexpugnable en la que se darán cita algunos agentes interesados en descubrir la verdad.

El misterio no será sencillo de resolver, pues muchas organizaciones están interesadas en resolver el misterio. Entre ellas…

Bajo el cargo de Zorlan d’Cannith, la rama Este de la Casa ha logrado incrementar el status de la misma en Karrnath, aunque ella misma se ha visto influenciada por las tradiciones marciales de Rekkenmark, con quien de acuerdo a los rumores, mantiene un tratado de armamentismo y entrenamiento mutuos. Si bien los proyectos personales de Zorlan son conocidos a unos pocos, casi todos los que trabajan en Cannith Este sospechan que no es coincidencia que el establecimiento de la sede de ésta se encuentre en una nación que hizo uso de no-muertos durante la guerra.

Controlada por Jorlanna d’Cannith, la sede occidental de la Casa ha tomado un rumbo mucho más diplomático. El acercamiento tanto a los Doce como a la Alta Academia del Congreso Arcano hace pensar a quienes opinan en dichas materias que Jorlanna es la que más posibilidades tiene de convertirse en Barón, de no ser por sus indiscreciones de juventud y poco acercamiento filial a Starrin. La desaparición de su contrincante ha hecho que la paranoia se dispare dentro de la casa, y por ello ha decidido enviar a sus propios agentes a investigar lo sucedido.

Sin duda alguna, los más desconcertados con la desaparición de Merrix son sus propios súbditos en la rama sur de la Casa. Todos creen que ellos saben la verdad y la ocultan a propósito, y así han decidido implícitamente no contradecir esa opinión. Sin embargo, no saber lo que sucedió los afecta directamente, pues no pueden decidir si su líder ha desaparecido voluntariamente o si necesita ser encontrado o hasta rescatado de fuerzas hostiles. Lo que es peor, es que nadie parece saber exactamente a qué se había dedicado Merrix tras la clausura de la Forja de Sharn unos años atrás.

Cuando por primera vez recibió una misiva personal de Merrix d’Cannith sobre cuestiones teológicas, el Alto Clérigo de la Iglesia del Anfitrión Soberano Phthaso Mogan pensó que se trataba de una broma. Cuando pocas semanas después recibió personalmente al famoso artífice, intentó despejar algunas de sus dudas de acuerdo al dogma en el que se apoyaron las decisiones del Tratado del Trono con respecto a las almas de los warforged. La posterior desaparición lo ha convencido de que activar ciertas influencias para lograr que un teólogo investigador sea bienvenido a las instalaciones Cannith no sólo era adecuado, sino necesario.

La archierofante de la Flama de Plata Ythana Morr mantiene una vigilancia extrema en cualquier forma de corrupción que pueda amenazar a la alta sociedad de Sharn. Tras el cisma de la Casa Cannith y el nombramiento de Merrix como candidato a Barón, Ythana siempre ha sospechado que sus actividades se aprovechan de la zona más gris de la moralidad. Si bien su opinión sobre los warforged fue determinante durante las negociaciones de paz al final de la guerra, Ythana siempre ha querido encontrar la prueba definitiva de que estas creaciones artificiales no poseen alma, y cree que éstas pueden tener que ver con la desaparición del artífice.

Como agencia de inteligencia al servicio del rey Boranel, los Dark Lanterns en la Ciudadela se precian de saber todo lo que sucede en Breland. La desaparición de un influyente heredero Cannith siempre tiene consecuencias políticas, y por eso es necesario que la élite gubernamental de la nación sepa todos los detalles de lo acontecido. Antes de proporcionar un informe con grandes espacios en blanco, el capitán Talleon Haliar Tonan ha decidido infiltrar un agente que pueda llenarlos.

«Si algo sucede en la Guerra, lo sabrá gracias a la Crónica de Korranberg» fue el lema del popular periódico durante casi un siglo. Con el final de la guerra, los investigadores del mismo se han dedicado a hacer grandes y escandalosos destapes políticos. Regalus ir’Korran, editor de la columna más leída a través de las Cinco Naciones, ya está pensando en retirarse, pero no antes de conseguir la historia que lo haga incomparablemente famoso. Y eso es justamente lo que la desaparición de Merrix le ha facilitado.

La desaparición de un heredero no es un asunto de incumbencia privada de su casa, pues afecta a todas las Casas Marcadas; más aún a aquéllas directamente vinculadas con él. Kundarak acababa de reforzar su domicilio con las más infranqueables medidas de seguridad; Thuranni y Phiarlan buscan pistas sobre sus proyectos; y Medani cree que puede resolver el misterio para incrementar su prestigio. Y claro, para no levantar sospechas, es posible que se utilice miembros de otras casas que hayan estudiado en la Academia de los Doce.

Cualquier cosa que pueda dar a los miembros del Aurum una ventaja comercial sobre los demás siempre será buscada y bienvenida, más aún si nadie más la conoce. Es precisamente por eso que los proyectos personales de Merrix son tan valiosos y el mismo Canciller de Platino Antus ir’Soldorak ha comisionado la misión en la que éstos deben ser recuperados sin importar las medidas a tomar para lograrlo.

Puedes seguir los momentos más notables de la historia a través de este enlace.