El Devoto

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Bienvenidos a una nueva entrega en esta serie de artículos sobre «Héroes de Eberron». Usamos estos para adentraremos en arquetipos muy particulares a este entorno de campaña, ofreciendo algunas piezas clave en caso de que te provoque jugarlo en una campaña. La mayoría de los arquetipos funcionan bien para personajes de cualquier clase y raza, pero hay algunas que resultarán más cliché que otras. Cada artículo está dividido en dos partes: Aventuras incluirá tus motivaciones, mientras Personalidad se refiere a distintas características usuales en este tipo de héroes. Al final del artículo, te daremos un ejemplo de un personaje construido en base a dicho arquetipo. Sin más, hoy les presentamos al Devoto.

“Los Soberanos nos protegen.”

—Kuduth, clérigo semielfo

Incluso si no eres un clérigo, las deidades del Anfitrión Soberano son importantes para ti. No solo fuiste educado para mostrarles la debida reverencia, sino que la devoción a los ideales que representan guía cada uno de tus pasos.

Aventuras

Sea por educación formal o tradición familiar, has sido profundamente influenciado por los mitos relacionados con el Anfitrión Soberano y los Seis Oscuros, algunos de los cuales ya no son muy conocidos, pero que han inspirado a innumerables generaciones de héroes a tomar las armas contra las fuerzas del mal en el mundo. Estos mitos se denominan colectivamente la Saga de la Rebelión, y hablan de la lucha original y en curso de los Seis Oscuros contra la influencia de los Soberanos en Eberron. Según estos relatos antiguos, es el trabajo de los devotos descastar nuevamente a los Seis Oscuros, lo que solamente se logrará sofocando a sus seguidores rebeldes.

Naturalmente, no es probable que la reunión de los Seis Oscuros con el resto del panteón suceda pronto, aunque ciertos grupos apocalípticos creen en su inevitabilidad. Por lo tanto, para la mayoría de los devotos aventureros, sofocar la rebelión aniquilando monstruos, encarcelando nigromantes y haciendo proselitismo es poco más que una buena justificación a largo plazo para acciones que también tienen sentido a corto plazo, al hacer que el mundo sea más seguro para los pueblos civilizados de Khorvaire.

Personalidad

Tu devoción al Anfitrión brilla a través de todo lo que haces, o al menos eso esperas. Cuando entras en batalla, tratas de reflejar la fuerza de Dol Dorn y el honor de Dol Arrah. Ofreces oraciones a Olladra, Arawai y Balinor antes de comer, a Onatar antes de usar tus habilidades de artesanía y a Aureon cada vez que lanzas un hechizo. Proteges a familias y aldeas a imitación de Boldrei, y proteges caravanas y mercaderes por el bien de Kol Korran.

Tu devoción es definitivamente tu característica definitoria, pero describe poco tu personalidad, que depende de otros aspectos. No eres necesariamente un mojigato, un pacifista o un filántropo, aunque podrías ser cualquiera de esas cosas. Lo que sí sueles hacer es envolver todo lo que haces en un sudario de devoción religiosa. Probablemente no lo hagas conscientemente para tratar de impresionar a los demás; más bien, lo haces porque así es como has aprendido a hacer las cosas. Puedes sentir que todo lo que haces debería estar dedicado a Onatar, pero las oraciones que recitas por costumbre mientras elaboras son solo la expresión externa de esa creencia intrínseca.

Oraciones, juramentos e invocaciones salpican y llenan la forma en que te comunicas. Las invocaciones genéricas de los Soberanos sirven para muchos propósitos, como «¡Los Soberanos nos protejan!» o simplemente «¡Soberanos!» utilizado como una expresión de sorpresa o frustración. Las maldiciones a menudo usan los nombres de los Seis Oscuros: «¡La sombra de Aureon!» o «¡El guardián te lleva!» son comunes. Siéntete libre de improvisar oraciones breves a Dol Dorn antes de entrar en batalla, a Olladra antes de comer, o a Boldrei antes de descansar.

Aunque no es común, tampoco es raro ser devoto de una deidad particular del Anfitrión Soberano en lugar de todo el panteón. También podría ser que rindas devoción a la Flama de Plata, el Camino de la Luz o la Corte Eterna: si es el caso, tus motivaciones y juramentos específicos variarán, pero tu personalidad básica podría parecerse a este arquetipo.

Un Devoto

Aunque la devoción a dioses individuales les permite a ciertos héroes obtener poderes adicionales, hay quienes no pueden dejar de lado a un Soberano frente a otro. Considerados los más fervorosos, clérigos como Sejra Whitebinder reprensentan una pequeña fracción en la jerarquía de la iglesia. Ella siempre dirá que es injusto presumir que su fe es más fuerte que la de otros, pues en su modestia ha encontrado la forma de enseñar con el ejemplo.

Sejra cree firmemente que todos los Soberanos están presentes en todos los aspectos de la vida, y se ha dedicado a servirles tanto como le es posible. Empezó trabajando en el templo de su comunidad, pero pronto se entregó a un estilo de vida errante, buscando todos los aspectos de lo divino en Eberron. Siempre protectora de otros vasallos, Sejra no puede evitar sentir una profunda pena por aquéllos que no ven la gloria del Anfitrión Soberano, y no entiende cómo hay quienes se entregan a seguir a un dios sobre otro, en lugar de abrazar lo completa que es toda la creación.

Sejra es muy respetada en muchos lugares: su estilo de vida fuera de la jerarquía de la iglesia y sus sabios consejos hacen que quienes la hayan conocido confíen en ella como árbitro en conflictos locales, estando seguros que su decisión será respetada por todas las partes involucradas.

Sejra Whitebinder es una mediana clériga con dominio del Soberano («Morgrave Miscellany», pg.23) y el trasfondo acólito.

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