Este artículo es parte de una serie durante todo Abril 2024 tanto para el Reto de la A a la Z como para el Carnaval de Blogs Roleros.
Book, un mago warforged, se había estado preparando para este viaje a las ruinas de Xen’drik desde el momento en que escuchó por primera vez las historias susurradas en las tabernas de Sharn. Su báculo y su mano adicional eran sólo dos de los elementos de su arsenal arcano: también lucía un brazalete de varitas, un anillo de artificio magistral y un par de gafas Cannith.
Los forjados son una raza artificial de constructos vivos originarias de Cyre y creadas por la Casa Cannith en el año 965 YK para luchar en la Última Guerra. Los forjados son construcciones sensibles y tienen libre albedrío, lo que les valió los mismos derechos que los ciudadanos humanos en cada una de sus tierras natales en el año 996 YK con la firma del Tratado de Thronehold.
Como especie artificial, están hechos de una variedad de materiales, que incluyen piedra, metal y madera oscura, que han sido imbuidos de magia. Aunque su diseño puede variar, comparten rasgos comunes de una mandíbula articulada y ojos hechos de cristal. Todos los forjados tienen algunas defensas integradas, y muchos usan una armadura adicional que se ha integrado en su cuerpo. Al igual que los humanoides, los forjados pueden curarse con magia y verse afectados por efectos que alteran la mente, pero al igual que los constructos, no necesitan dormir, comer ni respirar, y también son inmunes o resistentes al veneno. Para descansar, entran en un estado inerte pero plenamente consciente.
Los warforged y el dilema de los conflictos sociales
Los forjados pueden tener rasgos de personalidad únicos, aunque al ser constructos, están restringidos de alguna manera. Experimentan ira, dolor, miedo y odio como sus creadores humanos; no todos los forjados son increíblemente reservados y pensativos, y esconden una variedad de emociones detrás de su rostro metálico. Sus rostros no fueron diseñados para mostrar expresiones faciales, por lo que puede parecer que están distantes durante cualquier interacción social. A pesar de ello, no carecen por completo de expresiones, ya que sus ojos tienden a brillar cuando experimentan emociones fuertes o específicas.
Algunos forjados son increíblemente ingenuos y carecen de introspección; sin embargo, muchos otros son todo lo contrario y cuestionan su existencia, se preguntan si tienen alma y se preguntan qué será de ellos en el más allá. Los forjados más inteligentes crean filosofías complejas sobre lo que perciben y aprenden. Aunque pueden mostrar lealtad a religiones y organizaciones, por lo general se vuelven leales a un pequeño grupo de camaradas.
La guerra y el condicionamiento militar crean la base de sus personalidades, por lo que el deber y la cadena de mando siempre forman parte importante de ellas. Por lo general no tienen sexo en la forma del cuerpo, por lo que algunos no se molestan con ello, mientras que otros adoptan una identidad de género. Cada uno recibió designaciones numéricas como parte de su fabricación y servicio militar, pero la mayoría ha adoptado nuevos nombres, usualmente aceptando los apodos que les dan sus camaradas, mientras que otros buscan obtener nombres más significativos que los describan mejor.
A pesar de la naturaleza pacífica de los forjados, muchos ciudadanos de las Cinco Naciones los ven como recordatorios de un pasado oscuro. Algunos todavía los ven como implementos de destrucción, máquinas y equipos de matar hechos con la forma de un hombre, y los ven como un peligro que debe ser destruido o eliminado de la sociedad. De las Cinco Naciones, puede ser una sola la que tenga la actitud social menos liberal hacia ellos, viéndolos como máquinas en lugar de individuos. Pero este prejuicio no es exclusivo de una nación y siempre hay quienes respaldan organizaciones contra los forjados y abogan por el destierro e incluso asesinato y fundición de los forjados.
Aquéllos que han sido puestos en libertad han recibido los mismos derechos que otros ciudadanos de las otras naciones, lo que puede haber sido algo traumático para los forjados que estaban acostumbrados a tener un solo propósito con órdenes e instrucciones. Algunos se convirtieron en sirvientes instruidos para reparar los daños de la guerra, mientras que otros quedaron ociosos después de perder su único propósito en la vida, en ocasiones quedándose quietos en los campos durante días, con la esperanza de recibir órdenes. Al darse cuenta de que éstas nunca llegarían, es que comenzaron a unirse para buscar nuevos propósitos a la vez de buscar líderes dentro de su propia raza para darles sentido.
¡Lanza iniciativa!
Jugar un personaje warforged te brinda oportunidades únicas para rolear, desde explorando su recién encontrada sensibilidad e identidad hasta cuestionar la existencialidad de lo que significa significa estar vivo, ser libre y tener un alma. Sus orígenes y propósito están completamente abiertos. ¿Fue tu personaje creado como soldado? ¿Explorador? ¿Cuidador? Esta flexibilidad te permite crear una historia de fondo y motivaciones verdaderamente únicas. Y si bien sus rasgos raciales son muy beneficiosos dentro del juego, lo que realmente puede llegar a ser extraordinario es lidiar con los prejuicios y su perspectiva única del mundo. Tener un cuerpo no biológico le da a los warforged curiosidad al no comprender las emociones o las necesidades físicas de la misma manera, llevando a interacciones y observaciones interesantes. Finalmente, Eberron integra también el misterio de su orígenes y el proceso de su creación, el que puedes explorar como parte del arco de tu personaje, descubriendo secretos sobre su pasado y sus creadores.
Como DM, en algún momento estarás tentado de incorporar al Señor de las Espadas como antagonista. Sin duda alguna es una amenaza única, desafiando los roles tradicionales de monstruos y humanoides. Sus motivaciones y objetivos son complejos, lo que lo convierte en un adversario más interesante que un simple villano que «destruye todo». Su mera presencia plantea interrogantes sobre la naturaleza de la libertad, sin mencionar que sus acciones pueden verse como destructivas y potencialmente liberadoras para sus compañeros de guerra, creando ambigüedad moral profundamente ligada a la historia y la tradición de Eberron, particularmente la Última Guerra y cómo la distinción entre lo «bueno» y lo «malo» o lo «legal» y lo «barbárico» dependen de la nación a la que uno pertenece.
Puedes retratar al Señor de las Espadas como un mesías o como un terrorista, dependiendo del tono y los temas que quieras explorar en tu campaña. Como Enviado y Salvador de los warforged, podría ser visto como un líder que lucha por los derechos de sus congéneres para asegurar su libertad. Sus métodos, a pesar de sus nobles objetivos, podrían ser violentos y destructivos, creando un conflicto interno para los personajes que podrían estar de acuerdo con sus objetivos pero no con sus tácticas. Úsalo como Mesías si quieres que tu campaña aborde el concepto de libertad y sus posibles consecuencias: ¿Es posible la verdadera libertad para los seres artificiales? ¿Qué precio están dispuestos a pagar por ella? Como terrorista desalmado, el Señor de las Espadas es una amenaza implacable que representa un peligro claro y presente para el mundo en su totalidad. Sus acciones pueden representar las cicatrices duraderas de la Última Guerra y los peligros de la violencia desenfrenada, con motivaciones tan simples como también complejas. Úsalo de esta manera si quieres que tu campaña lidie con los límites de la venganza o el destino: ¿Es castigar a los culpables la major forma de proteger a sus inocentes? ¿Si uno es creado para ser un arma, cuál es su propósito cuando ésta termina? La representación más interesante, claro, podría encontrarse en algún punto entre estos dos extremos. Podría ser un líder carismático con una visión retorcida de la libertad absoluta, empleando tácticas brutales que algunos apoyan y otros encuentran aborrecibles. Si consideras cuidadosamente estos aspectos, podrás crear un Señor de las Espadas que desafiará a tus jugadores y dejará una impresión duradera en tu campaña.
El origen
Los warforged son uno de los elementos más emblemáticos de Eberron, y no podían faltar en el Style Guide original. En estas ilustraciones podemos ver un warforged tradicional y el espectacular diseño del Señor de las Espadas, que se ha mantenido casi idéntico hasta su forma final. Éste tiene una presencia imponente cuyo diseño enfatiza su poderío y destreza marciales, con un cuerpo fuertemente blindado, armamento integrado con espadas que se extienden desde sus hombros y un casco que junto a su postura irradian una sensación de mando y autoridad.
En el caso de los warforged más comunes, vemos que su tamaño y proporciones generales son generalmente similares a los de los humanos, pero construidos principalmente a partir de una combinación de placas de metal y fibras de madera. Es fácil imaginar cómo el metal suele estar pulido y reluciente, aunque también puede estar erosionado, rayado o incluso oxidado dependiendo de la edad y las experiencias del forjado, mientras que las fibras de madera actúan como una especie de musculatura interna, permitiendo que el forjado se mueva y funcione. Sus rostros carecen de muchas de las características expresivas de los seres orgánicos, aunque sí muestran un arco superciliar prominente, una mandíbula fuerte y ojos hundidos. También podemos apreciar lo que luego sería definido como el «ghulra», una runa única grabada en su frente.
¿Has jugado alguna vez un warforged? ¿Has pensado en incorporar a uno de los antagonistas más emblemáticos del mundo en tu campaña?